lunedì 11 aprile 2011

Oh la la París...


Hacía un poco de tiempo que las locuras de millas y millas recorridas no regresaban a mi blog. En un periodo cerrado en mi vida de locuras aventureras, de magia contenida y de contiendas internas; me rebelo contra el sistema preestablecido de canones de futuros inciertos. Obligaciones, que mas da, ahora quiero mas; un poquito de viaje, un poquito de reeencuentro, y porque no un poco de variedad cultural.

Me voy unos diitas a Paris, me reencuentro con Pili. Del Palo a el inframundo parisino llamado Disaneyland, pero mi ignorancia inniteligible me llevo alli. Mickey me escupio, pero fallo. Conversamos en giros, mientras soñamos. Aciertos lejanos. Somos nosotros, seremos esos.



Gratitud interesada, ocio infantil, ilusión desbordada. Minnie defiende a Mickey llorandome un rio de destrozos, imagines vacias, y reparaciones posttemporada. Nos vemos luego, algo haremos, de sustento me tienes en los brazos de tus amigos, agradecido me hayo, transcurre el dia, llegas Pili, a dormir.

Louvre, cultura piramidal, idealizada la esencia descubro mi desencanto, pero en la maxima consciencia, reconozco mi halago. De alli cammino, del camino un libro; de ese libro , una torre y desde esa torre, una revolución etilicamente suave en las cintas de cassette. Volvamos, pero cuidado que se retrasa,. y ese retraso nos llevara a conversaciones surrealistas con entes transoceanicos.

Orsay, emocion desbordada , asociada al conocimiento prematura de obras de consciencia, una iglesia jorobada por su masificada fama internacional, una visita alrededor de los muros exteriores de la tumba de Edith Piaf; y lo que antes era creación y cultura ahora es el momento globalizado del suvenir. Amelie sobreguarda un poco de encanto turistico en su local.

Crepes a la Parisina, un concierto Underground, y la odisea del suicidio; afortunado el por su valentía, desafortunados nosotros por nuestra espera.

Debo irme a Barcelona......Mañana más.